27/3/11

Cubo de palomitas - Sucker Punch


Ayer fue uno de los días que más esperaba a lo largo del año, mi cita en los cines con Zack Snyder. Cuando ya conoces a este director, sabes que a nivel audiovisual no puedes salir decepcionado, aunque como narrador de largometrajes pueda fallar un poco (le queda por pulir a este señor), si sabes a lo que vas, no puede decepcionarte.

Tras la muerte de su madre, Babydoll (Emily Browning) cae en una fuerte depresión producida por los malos tratos dados por su padrastro, al quien intenta matar sin éxito durante una noche de tormenta. Babydoll es internada en una institución psiquiátrica femenina, y en cuanto se entera de que dentro de cinco días será lobotomizada, decide pasar a la acción urdiendo un plan para escapar, apoyándose en su imaginación para que los días en ese lugar sean más llevaderos.

A lo largo del film puede llegar a darnos la sensación de que el planteamiento de algunos temas en la historia son algo similares a Origen, por aquello del tema de los sueños, sueños dentro de otros sueños, etc. porque aquí, Babydoll se imagina un mundo de estética retro donde el manicomio es un cabaret, y pasamos al universo fantástico cuando Babydoll se pone a bailar. Babydoll deberá conseguir cuatro objetos para escapar, la obtención de cada uno de ellos es una misión/baile, de forma que puede dar esa sensación de planteamiento videojueguil de: llegar al sitio, matar a todo lo que se mueva, conseguir el objeto, y escapar. Es por ello que, cuando llevamos tres de estas misiones (todas ellas espectaculares), puede haber una pequeña caida de interés por parte del espectador, ya que éstas no tienen ninguna progresión dramática, la sensación de peligro real no está ahí, cosa que si se genera en la misión de los robots, y que hace que la película levante el vuelo.


El inconveniente que algunos pueden encontrarse al ver la película, es que los saltos entre universos los descoloquen un poco (sobretodo al inicio, cuando no estás acostumbrado) y piensen que muchas cosas ocurren sin razón concreta, ya que las secuencias de acción pueden nublar eso.

Pasando a aspectos más positivos de la película, las secuencias de acción son de lo mejorcito que se ha visto este año en pantalla, con un despliegue de recursos brutal, una integración del CGI digna de mención, peleas muy bien coreografiadas y mucha imaginación, y cuando piensas que ya no puede ofrecerte nada nuevo, te lo da (ese falso plano secuencia de los robots es un claro ejemplo). El diseño de producción de la película (vestuario, decorados, escenarios digitales,...) es también algo por encima de la media, como nos tiene acostumbrados el director. En cuanto al reparto, Jena Malone, Abbie Cornish, y Oscar Isaac, aunque el resto del reparto funciona bastante bien, la verdad es que sus papeles no suponen ningún reto muy grande (con tanta secuencia de acción tampoco es que puedas fijarte mucho). Por cierto, la banda sonora es de alto nivel, haceos con ella en cuanto podáis.

En definitiva, especialmente pensada para fans de Zack Snyder, los cuales es bastante probable que acaben flipando en colores durante gran parte de la película, otros muchos no verán más allá de las tías buenas y los tiros, pero la película es más de lo que parece, quizá no esté resuelto de la forma ideal para que nos demos cuenta a la primera de cambio, y ese es su mayor fallo. Snyder ha intentado hacer una mezcla imposible, y el experimento no está nada mal.


Nota: 7

1 comentario:

  1. Cabe destacar que varios temas de la bso los canta la propia Emily Browning.
    Melafo.

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