Diez años después de que Sidney (Neve Campbell) abandonase su pueblo natal, vuelve para presentar su primer libro. El mismo día que llega, el asesino que la estuvo perturbando e intentando asesinar durante tantos años, vuelve a la carga asesinando varios estudiantes del instituto local, pero ella sigue siendo su objetivo prioritario.
Tras haber visto la trilogía de Scream (un tanto irregular, pero siempre fiel a sí misma), la verdad es que esperaba esta continuación como agua de mayo, y no he salido para nada decepcionado. Scream 4 vuelve a los viejos tiempos, pero también se reinventa a sí misma con el reparto de siempre y otro totalmente nuevo. Tras una primera media hora magistral, donde el film se la arriesga de verdad, con metacine constante que hará disfrutar a los fans de la saga (y a los que no lo sean también, ¿por qué no?), la presentación de la nueva generación de protagonistas y el regreso del reparto original, pasamos a un segundo acto bastante flojo, donde se suceden todos los asesinatos posibles mientras Ghostface intenta acabar con Sidney. Esta vez las muertes han perdido prácticamente toda su frescura, no son nada especialmente nuevo y debido a la enorme cantidad de gags, apenas llega a haber tensión en el ambiente, aunque los momentos cómicos del film son de agradecer y seña de identidad de la saga total. Finalmente, la película consigue remontar con un giro bastante inesperado y un final al que le cuesta llegar, pero que es realmente emocionante.
En cuanto al reparto, el trío protagonista, Neve Campbell, Courteney Cox y David Arquette, siguen haciendo de sus personajes, algo gastados ya (sobretodo el de Cox). Sidney sigue siendo la sufridora y Dewey sigue siendo un poco gilí, pero cuando los personajes caen bien, caen bien. En cuanto al nuevo reparto, todos se encuentran a un buen nivel, en especial Hayden Panetierre (Héroes), Rory Culkin (exacto, el menor de los Culkin) y Erik Knudsen (Scott Pilgrim contra el mundo). Emma Roberts también tiene una actuación bastante solvente, pero su personaje llega a ser bastante pasivo durante gran parte de la película, y tampoco tiene mucho que aportar.
Para ir terminando, hay que destacar la excelente banda sonora de la película, realizando una variación del tema principal de la saga muy efectiva y demás canciones que aportan bastante atmósfera a la película y resulta un notable acompañamiento.
Resumiendo, una película pensada para aquellos que conocen la saga o son fans de ella, y que por lo tanto saben a lo que van, pillarán todas las referencias y ya se conocen el tono general de las películas. Los que no hayan visto las anteriores, quizá puedan apreciarla por lo que realmente es, una autocrítica y una burla hacia lo manido del género de terror actual, falto de nuevas ideas.
Nota: 7
Tras haber visto la trilogía de Scream (un tanto irregular, pero siempre fiel a sí misma), la verdad es que esperaba esta continuación como agua de mayo, y no he salido para nada decepcionado. Scream 4 vuelve a los viejos tiempos, pero también se reinventa a sí misma con el reparto de siempre y otro totalmente nuevo. Tras una primera media hora magistral, donde el film se la arriesga de verdad, con metacine constante que hará disfrutar a los fans de la saga (y a los que no lo sean también, ¿por qué no?), la presentación de la nueva generación de protagonistas y el regreso del reparto original, pasamos a un segundo acto bastante flojo, donde se suceden todos los asesinatos posibles mientras Ghostface intenta acabar con Sidney. Esta vez las muertes han perdido prácticamente toda su frescura, no son nada especialmente nuevo y debido a la enorme cantidad de gags, apenas llega a haber tensión en el ambiente, aunque los momentos cómicos del film son de agradecer y seña de identidad de la saga total. Finalmente, la película consigue remontar con un giro bastante inesperado y un final al que le cuesta llegar, pero que es realmente emocionante.
En cuanto al reparto, el trío protagonista, Neve Campbell, Courteney Cox y David Arquette, siguen haciendo de sus personajes, algo gastados ya (sobretodo el de Cox). Sidney sigue siendo la sufridora y Dewey sigue siendo un poco gilí, pero cuando los personajes caen bien, caen bien. En cuanto al nuevo reparto, todos se encuentran a un buen nivel, en especial Hayden Panetierre (Héroes), Rory Culkin (exacto, el menor de los Culkin) y Erik Knudsen (Scott Pilgrim contra el mundo). Emma Roberts también tiene una actuación bastante solvente, pero su personaje llega a ser bastante pasivo durante gran parte de la película, y tampoco tiene mucho que aportar.
Para ir terminando, hay que destacar la excelente banda sonora de la película, realizando una variación del tema principal de la saga muy efectiva y demás canciones que aportan bastante atmósfera a la película y resulta un notable acompañamiento.
Resumiendo, una película pensada para aquellos que conocen la saga o son fans de ella, y que por lo tanto saben a lo que van, pillarán todas las referencias y ya se conocen el tono general de las películas. Los que no hayan visto las anteriores, quizá puedan apreciarla por lo que realmente es, una autocrítica y una burla hacia lo manido del género de terror actual, falto de nuevas ideas.
Nota: 7
No hay comentarios:
Publicar un comentario