Venga ya. Menudo año llevamos macho, y ayer me encuentro con esto. Brittany Murphy muere de un infarto en su casa de Los Ángeles a los 32 años. Por lo visto estaba en casa a su marido, pero cuando la ambulancia llegó al hospital no pudieron reanimarla, parte de las causas de la muerte es que la actriz llevaba arrastrando una gripe desde hacía algunos días y se había estado medicándose con receta.
Nació en el 77 en Nueva Jersey, y en 1991 participó en la serie Blossom. Su carrera en el cine empezó en 1995 con Clueless, junto con Alicia Silverstone. Unos años después alcanzó la fama con 8 Mile en 2001 y fue compaginando cintas independientes como Spun junto con cine más comercial como Recién casados o Niñera a la fuerza. También actuó en Ni una palabra con Michael Douglas y en Inocencia Interrumpida.
En 2005 interpretó en una de las películas por las que más se la conoce, Sin City, aunque parcialmente eclipsada por el plantel de papeles femeninos que poblaban la película, pero a mí personalmente siempre me llamó la atención en esa película. Demostró sus habilidades musicales en Happy Feet y participó en un thriller estrenado en España recientemente, The Dead Girl. En 2006 actuó en El libro mágico, junto con Aaron Eckhart y Ian McKellen.
En fin, una auténtica lástima para una actriz tan joven, que aunque no destacara por tener papeles brillantes ni nada parecido, sí que poseía cierto encanto especial y era una chica preciosa. Descanse en paz.
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