Ayer se confirmó la noticia de que poco antes de las 8 AM en USA, el grandísimo cantante...perdón, me equivoqué de palabra. El alma del Heavy Metal, Ronnie James Dio, murió tras una larga batalla con, en sus propias palabras, el dragón del cáncer.
67 años, una carrera intachable en la que fue frontman tanto de Ritchie Blackmore's Rainbow, como de Black Sabbath, como de Elf, y de su propio grupo, llamado Dio. Ya sin mencionar sus incontables colaboraciones con otros grupos, o ese gran proyecto de juntar a todos los grandes rockeros para una campaña contra el SIDA; éste guerrero del micrófono siguió de gira hasta que su enfermedad no le permitió seguir, ya que tenía programados conciertos alrededor del mundo (y tenía una minigira en España a la que yo tenía planeado asistir, maldita sea).
¿Qué ha hecho este hombre por el metal? Ayudó en la creación del power con sus letras de índole épica, popularizó la que ahora es la señal universal del metal (,|,,|), compuso OBRAS MAESTRAS al lado de GRANDES como Blackmore, Iommi; logró que nos olvidáramos de Ozzy con ese MAGNÍFICO Heaven and Hell, rockeó junto a Jack Black y Kyle Gass, y nos dejó una cantidad de HIMNOS que son inolvidables.
Me apena demasiado saber que este Dios de la música ha fallecido fuera de un escenario, que es como él hubiera querido caer, en medio de la batalla, en medio de su pasión.
De regalo, os dejo un par de temas por streaming, con el posterior disco que podéis esperar en un par de días. Un .rar con los que a mi parecer son las mejores canciones de su carrera.
Descansa en Paz, Ronnie James Dio (1942 - 2010)
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