17/1/12

Cubo de palomitas - XP3D


Os preguntaréis que demonios hago viendo un slasher español con un reparto de Física o Química, pues ha sido más bien como un favor, pero lo cierto es que esta cinta no sale tan mal parada como uno podría pensar. XP3D hay que tomársela como es: una película para adolescentes hormonados, con un sólido 3D, muertes creativas, algo de sangre y una historia que no aporta nada especialmente nuevo, pero que entretiene de sobras. Cuenta la historia de un grupo de estudiantes de medicina que, para conseguir aprobar el curso, un profesor les propone investigar un pueblo abandonado llamado Susurro, donde el médico del pueblo torturó y mató a varios habitantes, incluso después de muerto. Los estudiantes descubrirán que todo va más lejos de lo que ellos podrá esperarse.

Como ya he comentado antes, XP3D es el típico slasher adolescente, que se parece a muchas otras pelis del género, pero consigue parecerse lo suficiente como para llamar la antención, pero no demasiado como para quedar muy pastiche. Desgraciadamente la mayoría de actores no están a la altura, muchos se encuentran poco inspirados (especialmente el dúo Amaia Salamanca-Lucho Fernández), pero otros como Maxi Iglesias o Alba Ribas, consiguen salvarse bastante de la quema. Especialmente Iglesias, quien me ha sorprendido bastante por lo bien que me ha acabado cayendo su personaje. La película arranca de forma efectista con una falsa prueba para los alumnos, pero posteriormente va avanzando debidamente hasta llegar al pueblo de Susurro, donde empiezan a ocurrir los asesinatos, que impactan y divierten a los entusiastas del género a partes iguales. Desgraciadamente las líneas más dramáticas pecan de forzadas en ciertas ocasiones, pero sí es cierto que la peli cuenta con algunos gags que ayudan bastante a que la película sea más digerible. XP3D también cuenta con un giro bastante acertado, que aunque puede recordar un tanto a Alta Tensión, lo cierto es que le da cierto toque a la película, ya que no es tan gratuito como en la anteriormente mencionada, gracias a una serie de flashbacks repartidos a lo largo de la película. Además de que el villano del film, resulta bastante diferenciador y carismático, gracias a la presencia y voz de Manuel de Blas.



A nivel técnico es donde la película puede resultar más elogiable. Cuenta con una estupenda fotografía de Sergi Bartolí, sobretodo en las secuencias nocturnas. Esto se complementa bastante bien con su 3D, aunque no pueden faltar algunas cosas volando hacia cámara, lo cierto es que se torna bastante inmersivo en momentos menos previsibles, como el plano de la casa de muñecas, por ejemplo. Otro punto también para el músico Marc Vaíllo, quien se marca un tanto con unos pesados violines que ya desde el minuto 1 le otorgan la atmósfera necesaria a la película.

No esperéis nada especialmente nuevo, a menos que seáis unos entusiastas de las tres dimensiones y buenos efectos especiales (los digitales no tanto), del cine palomitero y del humor negro, que siempre viene bien.



Nota: 5

13/1/12

Cubo de palomitas - Drive


Sólo era cuestión de tiempo que la crítica de Drive saliera a la luz. Después del enorme revuelo que ha causa esta película en las redes sociales y la crítica norteamericana, no es de extrañar que muchos hayan esperado esta película como agua de mayo. Lo cierto es que, aunque tenía ciertas reservas hacia este film, lo esperaba con bastante expectación. Drive es arriesgada, intensa e hipnótica.

A partir de un planteamiento la mar de simple, pero igual de llamativo, en la que un conductor especialista en películas de día, que de noche es conductor de atracadores, tras conocer al amor de su vida se ve sumido en una trama de traiciones y asesinatos de la cual él es en parte responsable. Nicolas Wiedyn Refn es el que se ocupa de adaptar la novela del mismo nombre al cine, aunque su trayectoria de culto es bastante curiosa y llamativa (sobretodo por su peculiar punto de vista de los vikingos en Valhalla Rising), Refn se mantiene fiel a sí mismo con largos momentos de silencio, interpretaciones sosegadas y escenas muy visuales y contundentes. Es por ello que Drive quizá no pueda satisfacer a mucha más gente que los entusiastas del cine en general, ya que ésta es todo un homenaje a las películas de coches de los setenta y ochenta, sobretodo a nivel estético, donde las pintas del personaje de Ryan Gosling lo dicen todo. 


Aunque muchos puedan sentirse decepcionados con esta película debido a la simpleza de su trama, cosa que puedo entender, ya que ésta es bastánte típica, si no fuera por la preciosa historia de amor entre los protagonistas, muy visual, fácil de entender e idílica. Refn dedica muchos minutos a la pareja que conforman Gosling y Mulligan, muchas miradas de complicidad, sonrisas y diálogos la mar de secos (abundan los 'vale' y los 'bien'), que se complementan con la gran puntería musical de Clif Martínez para componer y los estupendos temas escogidos de carácter electrónico que posteriormente muchos querrán escuchar una y otra vez. Es por ello que la música juega un papel importantísimo en Drive, es la que se ocupa de definir la película, de transmitir esa sensación de extraño videoclip en ciertos momentos, aunque no por ello se abandona la historia, como el primer paseo en coche que hacen juntos Irene y el protagonista con 'The Real Hero' de fondo. Tampoco escasean las escenas memorables en el film, como el beso en el ascensor, del cual ya he hablado en mi top 7, la primera persecución del film, o ver a Ryan Gosling con la cara llena de sangre después de un tiroteo. Y ese es otro de los puntos fuertes del film y que sorprenden, aunque bastante consecuentes con el cine de Refn: su violencia explícita. Para algunos pueden resultar excesivos, pero lo cierto es que aumentan la sensación constante de inquietud que no puedes evitar sentir en gran parte de la película, debido a la frialdad del personaje de Gosling, sonriendo solamente cuando Irene está cerca y con quien realmente puede ser bueno. Obviamente Albert Brooks y Ron Perlman no podían ser menos, y como pareja de villanos resultan atractivos y carismáticos, muy del estilo de Los Soprano, en especial con Perlman, el malhablado mafioso al cargo de pizzería a la que nunca va nadie. Brooks se presenta como un villano más sosegado, pero que poco a poco se va tornando más salvaje, igual que el protagonista.

Una de las pelis del pasado año, que pasará desapercibida para mucha gente y que durará poco en taquilla, pero hay que verla. Y que no os engañe el trailer, no es Fast & Furious.


Nota: 9

3/1/12

Top 7 - Las mejores películas de 2011

Bueno, ya sabéis cómo funciona esto, así que paso de explicaciones innecesarias, pero sigo recordando que es opinión personal y que siempre puedo equivocarme (y vosotros también, qué coño).

7. Un dios salvaje

Aunque Roman Polanski casi siempre es una apuesta segura y es uno de los directores que mejor me cae, lo cierto es que Un dios salvaje no me entusiasmaba demasiado, aunque los acercamientos de Polanski a la comedia que he visto han sido satisfactorios. Lo cierto es que Un dios salvaje resulta una sátira la mar de interesante que explota al máximo su mayor recurso: el reparto. Los cuatro están estupendos y son la razón principal por la cual recomiendo ver esta película.

6. Primos

A pesar de que este año ha sido uno de los que más cine español he visto en toda mi vida, entre Sitges y alguna en cartelera bastante interesante como Mientras Duermes, ninguna me ha causado tanto impacto como Primos. Daniel Sánchez Arévalo crea una divertidísima comedia romántica que he visto ya 8 veces en un año, gracias a ese trío implacable de protagonistas y sus reflexiones sobre el amor que tan reales pueden sonarnos a algunos.


La Patrulla-X ha vuelto con fuerza gracias a la unión de Bryan Singer y Matthew Vaughn, quienes establecen una precuela que prácticamente consigue superar a la original, gracias al imbatible personaje de Magneto (con un fabuloso Michael Fassbender), aunque el resto del reparto no se queda para nada atrás. A pesar de lo desafortunado de algunos efectos digitales y algún que otro apunte, ese toque retro y las referencias a la primera parte hacen que X-men: Primera Generación sea la mejor película de superhéroes del año.

4. Super 8

Después del pelotazo de Star Trek, J.J. Abrahms hace una película más personal, homenajeando como bien sabe al cine de Spielberg, con un grupo de chavales divertidos que se enfrentan a una invasión extraterrestre. A pesar de que peca de un final poco intenso, lo cierto es que todo el trayecto hacia allí es la mar de placentero.


Poca gente se esperaba que una precuela algo oportunista de esa saga tan particular que es El planeta de los simios fuese ha contentar a tanta gente. Una historia de ciencia-ficción sólida que se ocupa de mostrarnos la evolución de ese personaje clave que es César en esta saga, con un estupendo Andy Serkis dotando de vida al personaje. Unos efectos digitales que, aunque no sean perfectos, ayudan estupendamente a la inmersión de la historia, y menuda música señores.

2. Drive

Algún colega me va a machacar por ponerla en segundo puesto, pero lo cierto es que no le quito mérito a esta película, ya que tiene a un enigmático Ryan Gosling, un Ron Perlman que siempre mola, un romance bonito y una dirección de fotografía apabullante. Muchas escenas contemplativas con una música maravillosa y una brutalidad ocasional que le viene muy bien.


Más por lo que ha conseguido que por la película en sí (que también). Jean Dujardin es un protagonista dignísimo, acompañado por su fiel y divertido perro, una clásica historia de amor que nunca se desgasta y un lenguaje cinematográfico basado en la música y en los puntuales efectos de sonido que resulta delicioso. Para los nostálgicos del cine clásico y para los que piensen que hacer un film de este tipo actualmente puede ser un suicido.


Menciones especiales:

Capitan América, El primer vengador: Después de una decepcionante Thor, la nueva adaptación del Capitán América se ha convertido en uno de mis entretenimientos del pasado año más apasionantes, porque Joe Johnston se ha conseguido redimir después de El hombre lobo, con ese espíritu a lo años 40, su diseño de producción y sus escenas de acción. Aunque el tener un villano tan insustancial (aunque consecuente con el producto), le arrebata los puntos que podría tener.
Medianoche en París: La película que Woody Allen debía hacer, preciosa y divertida. Owen Wilson se marca un buen papel, al igual que Marion Cotillard, siempre espléndida.
El árbol de la vida: La única película de Terrence Malick que me ha llegado a gustar, a pesar de su desarrollo interminable, su segundo tercio resulta ser todo un deleite visual que vale la pena contemplar.
Green Lantern: Después de haberme convertido en fan incondicional del personaje después de haber devorado tantos comics y haber chequeado el Extended Cut, debo defender este film de superhéroes, que aunque desperdicia parte de su potencial, resulta ser un entretenimiento digno con riqueza visual y efectivas escenas de acción.

1/1/12

Cubo de palomitas - Immortals


Hace miles de años, unos seres llamados inmortales poblaban la Tierra. Entre ellos se estableció una gran guerra, los vencedores se convirtieron en los llamados dioses, y los vencidos fueron encerrados en una gran celda, los llamados titanes. Ahora, el rey Hiperión (Mickey Rourke) ha declarado la guerra a toda Grecia, y está dispuesto a conseguir el arco Epiro, la única arma capaz de liberar a los titanes de su prisión. Teseo (Henry Cavill), un joven campesino protegido por los dioses, será el único capaz de pararle los pies a Hiperión y salvar la humanidad.

Una de las películas que más esperaba en 2011, y la verdad es que no me ha decepcionado. Immortals es la tercera película del particular director Tarsem Sighn, quien destaca principalmente por su apartado visual, tanto en escenarios como en vestuario, siempre muy recargado y colorido. Aquí no se ha quedado corto y ha aprovechado muchas ideas de 300, con la que comparte productores. Es por ello que la comparación entre ambas películas es inevitable, y aunque 300 está dotada de mayor fuerza gracias al carisma de Gerard Butler y al buen hacer de Zack Snyder, la cinta de Tarsem es bastante más brutal,  con escenas memorables y un villano a la altura.

El principal problema de Immortals es, como pasa mucho últimamente, tras ver el trailer te esperas una película de pura testosterona y acción constante. Testosterona hay, pero no es tan adrenalínica como uno esperaría, sobretodo en la primera mitad. Hay acción y muy bien rodada (con un plano secuencia lateral de Teseo repartiendo hostias como en 300, pero sin ralentizaciones), pero no abunda en la primera hora de película, lo cual puede hacer que te tomes la peli con lentitud si estás esperando todo el rato acción. Más allá de eso, el guión aunque no es especialmente destacable, debido a que tiene demasiadas frases tópicas (sobretodo por parte del personaje de John Hurt, quien ejerce de mentor de Teseo) y que gran parte de la carga narrativa se condensa ahí, por aquello del viaje de los protagonistas, huidas, algunas peleas, etc. Por suerte cada aparición de Mickey Rourke hace más llevadera la película y es un gusto verle, ya que se comporta con arrogancia y seriedad, un buen personaje sin duda, aunque intentan darle una justificación inicial que no llega a colar y que se podrían haber ahorrado. Por suerte, la película no intenta tirar demasiado del toque cómico, como pasaba con Furia de Titanes u otras producciones de este tipo, donde estaban los típicos personajes graciosos de turno, aquí de eso se ocupa el personaje de Stephen Dorff, pero no causa vergüenza ajena y resulta simpático. Si alguno se pregunta cómo está Henry Cavill como protagonista, la verdad es que simplemente bien. Puede carecer de fuerza sobretodo al inicio de la película, pero la verdad es que el chico se porta y cumple bastante bien, tanto a nivel interpretativo como físico en las escenas de acción. Donde Sam Worthington fallaba en Furia de Titanes, que era simplemente en que parecía que estaba igual todo el rato en contadas ocasiones, con Henry Cavill no pasa, su personaje es más pasional y ayuda a que te impliques más. Confío en que será un buen Superman.


Como ya he comentado, lo mejor de la película es su última media hora, donde se condensa todo lo que uno espera de esta peli, discurso motivacional del protagonista, escudos chocando con espadas, secuencias de lucha inspiradísimas y sangrientas, etc. Aquí la banda sonora acompaña perfectamente la acción y enfatiza cuando le corresponde, por lo que resulta un complemento bien aprovechado, sin pasar desapercibida ni pisar diálogos. La brutalidad y cantidad de sangre que hay en estas últimas escenas resulta abrumadora, y vale la pena destacar también lo bien integrados que están los titanes, aunque se nota que son digitales en algunos movimientos, parece que realmente estén allí. Cabe destacar también los efectos digitales, porque a pesar de que Immortals pueda parecer una película cara, no lo es. No goza de un presupuesto excesivamente elevado, lo cierto es que está realmente amortizado,  sobretodo en la integración de éstos. Lo más frecuente es que el estilo visual de Tarsem no sea al gusto de todos, por lo que habrá división entre los entusiastas como yo y a los que no les haya gustado, por el diseño de vestuario recargado y algo desconcertante en los dioses (como el casco de Poseidón). Pero lo cierto es que vale la pena por su deleite visual que resulta en momentos como el plano final de la película, la secuencia del barco o el combate con el minotauro.

En fin, una película que entusiasmará a algunos y otros detestarán, pero al menos está mejor construída que Furia de Titanes y se apoya en cosas positivas de 300 que tanto gustan.


Nota: 7

31/12/11

Brevedades - Trailers a gogó

Como he estado empanado un par de semanas por las vacaciones de Navidad, pongo este post hipervitaminado de información, empezando con el trailer de lo nuevo de J.A. Bayona, Lo imposible, protagonizada por Naomi Watts y Ewan McGregor, sobre lo acontecido hace unos años en Nueva Orleans, y que por cierto, tiene muy buena pinta.


Primer trailer oficial de Prometheus, la precuela-secuela-spinoff-cosa de Alien. Con muchas referencias a la peli original, aunque poca información.



Trailer oficial de El Hobbit: Un viaje inesperado. A pesar de que Jackson no lleva ni media peli rodada, ya ha salido el que me parece el trailer más bonito de los que han salido estos días, puro Señor de los Anillos.


Se confirma que el nuevo director de Thor 2 será Alan Taylor, quien principalmente se ha dedicado a rodar para la televisión, destacando sobretodo por los últimos capítulos de la primera temporada de Juego de Tronos. Espero que tenga que ver la trama con el rollo de la serie, porque sino no sé para qué lo contratan.

Trailer también de Ira de Titanes, la secuela de la infame Furia de Titanes, con un trailer casi tan potente como el de la anterior, pero yo no esperaría gran cosa.



Para acabar, nuevo trailer oficial de The Dark Knight Rises, y lo remataré con el nuevo poster que ha salido, una pasada.



Cubo de palomitas - The Artist


George Valentin (Jean Dujardin) es un popular actor de cine mudo que se queda prendado de una aspirante a actriz llamada Peppy Miller (Bérénice Dejo). Con la llegada del cine sonoro, Peppy irá haciéndose notar en Hollywood, mientras que George, que se niega a aceptar la imposición del sonoro y sigue realizando películas mudas, ve como su fama se va desvaneciendo poco a poco.

The artist es una de esas películas que en un primer momento llama la atención de cualquier cinéfilo, rodada en blanco y negro y muda, es una apuesta la mar de arriesgada que viene de la mano de Michel Hazanavicius (director francés casi inédito en España), quien construye un auténtico homenaje al cine clásico. Esta película resulta un éxito rotundo, no sólo por lo bien que resultan todos sus elementos, sino porque sale con éxito de esa peligrosa encrucijada. Nos encontramos ante una tragicomedia muy clásica para lo que respecta a películas ambientadas en la meca del cine y que recuerda bastante a Cantando bajo la lluvia: protagonista demasiado orgulloso cae en picado poco a poco hasta que llega a la conclusión de que lo que debe hace es renovarse o morir. Todo esto se explica de forma bastante accesible gracias a unos ocasionales intertítulos (menos de una treintena, lo cual está bastante bien) y una música que va amoldando el drama de la narración y que sabe aprovechar muy bien los silencios.


Jean Dujardin se muestra como un protagonista agradable, en muchas ocasiones divertido, pero que acaba viendo que el mundo se le echa encima. La química entre éste y Bérénice Dejo es extraordinaria, y como prueba de ello es el primer momento íntimo de ambos, cuando coinciden en un rodaje y el plano tiene que repetirse varias veces porque Valentin es incapaz de concentrarse teniendo a Peppy cerca. Por supuesto, el reparto secundario también es otro punto a favor, sobretodo porque tira de una plantilla de actores bastante conocida y que sorprende que estén en una película europea de este calibre, pero que le da un aire internacional. El caso más claro es el de John Goodman, quien interpreta a un productor de Hollywood amigo de George, pero que es el primero en rendirse ante el triunfo del cine sonoro. Goodman sabe imprimirle un carisma al personaje que le viene muy bien, complementando su presencia física. Curioso el papel de James Cromwell, quien interpreta al mayordomo de George, quien no sabe dedicarse a otra cosa y se niega a abandonar a su jefe. Y por último mencionar al perro de George, quien es el principal punto cómico del film, y cobra protagonismo en ciertas secuencias clave, recordando en muchas ocasiones a Milú, el perro de Tintín.

Ya para acabar y no destapar mucho más, añadir que no es una película que quizá se atreva a ver todo el mundo, porque ver una peli muda siempre da algo de miedo, pero The Artist resulta ser una película preciosa, tierna y respetuosa con el cine en el que se inspira.


Nota: 9

Top 7 - Las escenas que más me han gustado este año

Para ir añadiendo tops al blog, como cada fin de año, he decidido abrir una lista nueva con secuencias o momentos de pelis estrenadas este año que, ya sea por lo sorprendentes o lo mucho que las he disfrutado, han hecho que valga la pena haber visto la película. Lo más probable es que suelte una sarta de spoiler brutales, así que si no las habéis visto, absteneos.

7. El edificio derrumbándose en Transformers: El lado oscuro de la luna


Todos aquellos que hayan seguido este blog en los últimos años sabrán lo mucho que odié la segunda parte de Transformers, y pasados unos meses del estreno de la tercera película me animé a verla por métodos poco ortodoxos, y lo cierto es que, a pesar de que le sobra una hora de metraje, los diálogos ridículos y robots absurdos, la media hora final de la película acaba compensando. Principalmente porque el haber sido rodada en 3D y que Bay haya tenido que moderarse en la duración de los planos, un uso mayor de la cámara lenta, y el espectáculo puro y duro, hacen que Transformers 3: El lado oscuro de la luna me haya dejado con una sensación extraña, pero de habérmelo pasado la mar de bien.

6. Carol Ferris descubre a Hal Jordan en Green Lantern


Soy uno de los defensores de la adaptación de Green Lantern al cine, porque empezar esta colección de comics este año ha sido un gran descubrimiento para mí, y porque no me pareció tan mala como les resultó a algunos. A pesar de los gags infantiles y la falta de epicidad ocasional de la película, el universo de Green Lantern se presenta como algo bastante explotable y que a mí tanto me fascina de los comics. Lo más destacable y divertido de la peli es cuando, en un momento muy del rollo Superman, Hal Jordan (Ryan Reynolds) va a saludar a Carol Ferris, la chica que ha rescatado en la escena anterior y que al principio no lo reconoce, pero que al fijarse en sus rasgos sabe que es él. Como resultado se genera una secuencia muy divertida que me hizo soltar alguna carcajada.

5. El combate final de Acero Puro


Una de esas películas para todos los públicos que no esperas que llegue a ser la gran cosa, más que el perfecto entretenimiento de un sábado por la tarde, que es lo que acaba siendo. Con unos combates la mar de conseguidos y una música que le va como anillo al dedo, el combate final entre Atom y Zeus rezuma Rocky por todos los poros, de forma que uno no puede evitar implicarse en la escena y pasárselo como nunca. Atención al plano a cámara lenta de Atom realizando un puñetazo con salto a Zeus.

4. La persecución final de Fast Five


Una de esas películas que me daba bastante pereza de ver, después de una más que decepcionante cuarta entrega (aunque las anteriores tampoco es que fueran la leche), pero esta me sorprendió por lo entretenida que es en su conjunto, sin que me llegase a caer especialmente mal Paul Walker, y con un papel secundario de Dwayne Johnson bastante agradecido. Lo mejor de todo, la secuencia del robo al banco y la posterior persecución donde Walker y Diesel tiran juntos de la caja fuerte por toda la ciudad destruyéndolo todo a su paso. Acojonante.

3. Teseo encabeza un ejército en Immortals


Vale que igual me puede el entusiasmo, ya que la he visto en el cine hace un par de horas, pero teniendo en cuenta que la película ha acabado siendo más o menos lo que esperaba, y que el tramo final de la película resulta todo un caramelo para los que esperábamos algo así, que la emoción que he sentido en el cine ha sido brutal. Por la potente música, el momento de preparación de Teseo, su posterior discurso motivacional, y los combates de los dioses contra titanes y el plano secuencia del protagonista machacando enemigos a su paso, hacen que la película valga la pena.

2. El baile final de George Valentin en The Artist


Esta es una de las películas que marcan un año, por lo arriesgado de su propuesta y lo redondo que resulta su acabado final, un reparto sobresaliente, una historia clásica bien aprovechada, un aspecto visual impecable y una música maravillosa. Los últimos minutos del film sorprenden y llenan de alegría al espectador que se ha divertido con la película, porque todo acaba como tenía que acabar (y tú querías que acabase), y Jean Dujardin consigue valerse por sí mismo a la perfección.

1. El beso en el ascensor en Drive


Drive, una de esas películas de la que no sabes que esperarte, ya que resulta un ejercicio artístico la mar de curioso, y que acaba entusiasmando a la crítica y al público cinéfilo por lo hipnótico de su apartado visual y su perfectamente escogida música. Ryan Gosling es un protagonista misterioso y recio al que acabas admirando (por su actitud y su chaqueta), mientras que gran parte de la película se presenta como un drama romántico, el momento en el que se vuelve un thriller de violencia explícita y no se cortan un pelo, sabes que estás viendo algo que va en serio y que tiene ese tono crudo que te sorprende y te atrapa. La secuencia del ascensor, que combina el primer beso de los protagonistas a cámara lenta, empezando como un momento hermoso y delicado, inmediatamente después se convierte en un combate a muerte entre Ryan Gosling y uno de los villanos, que cuesta que realmente sea algo esperado.

11/12/11

Cubo de palomitas - In Time


Andrew Niccol, ese director y guionista que se ganó el respeto de muchos cinéfilos con Gattaca, se le fue la pinza con Simone y luego consiguió volver a levantar el vuelo con la estupenda El señor de la guerra, ha vuelto a la cartelera con In Time, una curiosa cinta de ciencia-ficción protagonizada por Justin Timberlake y Amanda Seyfried; donde en un futuro lejano la economía y la sociedad no se cimenta sobre el dinero sobre el tiempo de vida. Cada persona envejece hasta los 21 años, a partir de ahí tiene un año mínimo acumulado en su organismo, que puede irse ampliando ganándolo trabajando, recibiéndolo de otra persona, etc. todo ello sin envejecer un solo día más, pero cuando ese tiempo se agota, la persona muere. Will Salas (Justin Timberlake) es un joven que vive en la zona pobre del país con recursos bastante limitados, hasta que un buen día conoce a Henry Hamilton (Matt Bomer), un hombre con más de cien años acumulados en su brazo. Will consigue salvarle la vida y éste como agradecimiento le regala sus cien años restantes.

Desgraciadamente, a pesar de tener una premisa la mar de interesante, la película acaba yendo por otros derroteros después de unos estupendos 30 minutos, donde se nos presenta ese futuro distópico, al personaje, y la oportunidad que se le presenta. Después de eso la película se convierte en una especie de Bonnie & Clyde que, aunque no está mal en sí, ya que se complementa con la investigación policial y la búsqueda de los protagonistas encabezada por Cillian Murphy, lo cierto es que algunas cosas suenan a algo ya visto (ese complejo de Robin Hood que tiene Will regalando el tiempo que roba, por ejemplo). Por suerte el final resulta bastante satisfactorio y el carisma del villano es apreciable. Aunque la pareja protagonista no lo hace para nada mal (en especial Timberlake), lo cierto es que el personaje de Amanda Seyfried no da para mucho más, por lo que su presencia en la historia resulta poco gratificante. Quizás hubiera sido más interesante si el desarrollo de la historia hubiese ido por otros derroteros más relacionados con el espionaje, de forma que Will Salas fuera cargándose el sistema desde dentro. 

Lo cierto es que los toques futuristas que están elegantemente impresos en el film, como todo lo relacionado con el tiempo, la forma de distribuirlo, como se comportan los diferentes estatus sociales, etc. enriquecen en gran parte la película y consigue imprimirle un toque diferente a las demás cintas del género, cosa que se agradece. Aunque es inevitable comparar esta película con la primera del director, por aquello de coger a un protagonista socialmente marginado, la historia de amor, escenas en la playa, etc. Aunque se pueden considerar como marca de la casa y no como una falta de ideas.

En cuanto a ciertos apartados más técnicos, la película no se excede en apartados más digitales, como pueden ser escenarios claramente futuristas, coches voladores, etc. Es una ciencia-ficción muy similar a nuestra época, que básicamente se diferencia de lo actual por su apartado tecnológico y el diseño de vestuario (otro gran acierto del film). Los pocos efectos especiales que hay en el film pasan muy desapercibidos (salvo el accidente de coche, que chirría bastante), y eso se agradece bastante.

En definitiva, una interesantísima película que por desgracia no consigue aprovechar todo lo que debería los recursos argumentales que presenta, pero que resulta una buena película por su premisa original, su eficaz apartado visual y el buen hacer de su director.


Nota: 7

Cubo de palomitas - Acero Puro


Después de sorprenderme mucho con un trailer sobre robots boxeadores que vi hace más de medio año, por fin se ha estrenado Acero Puro, una producción de nuestro querido Steven Spielberg y protagonizada por el incombustible Hugh Jackman, donde interpreta a un ex-boxeador que se dedica a reciclar robots boxeadores para ganarse un dinerillo. Las complicaciones surgirán cuando descubra que debe encargarse de Max (Dakota Goyo), su hijo de 10 años que ahora se ha quedado solo tras la muerte de su madre.

Aunque nos encontramos ante una película bastante menos sería que como prometían los trailers, lo cierto es que Acero Puro es una cinta que resulta la mar de entretenida, aunque la historia está más que manida, los villanos son claramente estereotípicos y puede llegar a pasarse de larga, lo cierto es que la cinta consigue sostenerse sin ningún problema gracias a la espectacularidad de sus combates y sus momentos que fácilmente recuerdan a Rocky. La trama secundaria de niño-robot funciona a la perfección y resulta bastante entretenida, Hugh Jackman está más que cómodo con el papel y se tira gran parte de la peli pasándoselo bien; Dakota Goyo cumple bastante como niño de la película, con un personaje bastante vacilón con su padre y borde que hace que no llegue a ser el típico crío repelente. Por desgracia el papel de Evangeline Lilly como antiguo amor de Charlie no cuaja correctamente y resulta bastante innecesario durante gran parte del metraje.


Como ya he mencionado antes, gran parte de la gracia de la peli reside en todo lo relacionado con los robots, que en cierto modo es la razón por la cual uno va a ver esta película. Esta trama consiste principalmente en tío fracasado con muchas deudas se dedica a hacer pelear a sus robots en combates de mala muerte pero le puede la codicia y siempre pierde, hasta que un crío que le insiste en que usen a un robot encontrado en un desguace para luchar. Charlie y Max van ascendiendo en los puestos hasta que los fichan para pelear en la liga oficial. Como ya he dicho antes, un argumento al más puro estilo Rocky, ya visto, pero que igualmente funciona. Los combates están muy bien resueltos, con coreografías muy bien conseguidas y unos efectos digitales asombrosos, resulta impresionante la integración de los robots en los planos y el detalle de cada uno de ellos, combinando animatrónico y digital, eso y que ver a un robot luchar contra un toro no es especialmente normal.

Abreviando un poco más, esta es una película que a nivel técnico destaca por sus efectos digitales, el estupendo diseño de los robots y una más que efectiva banda sonora, mezclando temas hip-hop actuales y banda sonora compuesta por Danny Elfman (pasando de su estilo burtionano y tirando hacia algo más técnico). A pesar de tirar de una historia que ya está más que vista, lo cierto es que cumple con el principal objetivo de entretener, de modo que la mayoría de combates los más entusiastas (entre los que me incluyo) soltarán algunas onomatopeyas o gesticularán como si estuviesen en un combate de verdad.


Nota: 6'5

6/12/11

Brevedades - Trailers de los gordos

Como últimamente llegan las novedades algo más con cuentagotas de lo habitual, me he encontrado por ahí un par de trailers bastante impactantes. El primero de ellos que pondré es el de Cabin in the woods, aquella película de la cual colgué el poster hace un par de días. Por el trailer ésta tiene bastante buena pinta, manteniendo los tópicos del género pero añadiendo un pequeño giro de tuerca que puede valer mucho la pena.


El segundo y último es The Grey, película protagonizada por Liam Neeson, donde tras un accidente de avión enmedio de las montañas de Alaska, los supervivientes deberán enfrentarse a una jauría de lobos hambrientos. Atentos a los últimos segundos de trailer porque le dan a Neeson una sensación de bad-ass total.

Cubo de palomitas - Un método peligroso


Esta película cuenta la historia de Carl Jung (Michael Fassbender) y su relación con el famoso psicoanalista Sigmund Freud (Viggo Mortensen). Todo comienza cuando Jung debe tratar a Sabina Spielrein (Keira Knightley), una joven adinerada que tiene serios problemas de autocontrol y ansiedad relacionados con su infancia. Con el tiempo Jung acabará por enamorarse de ella y llevarán su relación más lejos de lo que ambos esperaban.

Lo cierto es que Cronenberg ha acabado alejándose totalmente del tipo de cine más orgánico y visceral que tanto le caracterizaba por algo más discreto, aunque también relacionado con la locura y la visceralidad, pero desde una vertiente más interna, y tratar una historia y unos personajes cuya vida y trabajo gira en torno al psicoanálisis me parece todo un acierto. Aunque puede resultar algo larga para los que no estén especialmente interesados en el tema del psicoanálisis (ya que gran parte de la trama gira en torno a eso, aunque se compensa en gran medida con la relación Sabina/Carl), lo cierto es que trata este tema con mucha solidez, gracias al carisma de alguien tan particular como Freud, donde se mantienen gran parte de los tópicos que giran en torno a él (su obsesión del subconsciente con lo sexual, por ejemplo). Esto se debe en parte al buen hacer de su reparto, aunque Viggo no llega a tener tanta presencia como cabría esperar, lo cierto es que su presencia más bien secundaria está bastante bien dosificada y otorga cierta comicidad cuando es necesario. Michael Fassbender ya está pasando a ser uno de los pesos pesados de la industria, aparte de ser uno de los actores de moda, consigue clavar un personaje tan rígido. Keira Knightley, aunque al principio cuesta un poco pillarla, ya que se nos la presenta en su etapa más extrema y alocada, cuesta digerirla al principio, pero según avanza el metraje se va relajando más y se aprecia mejor su actuación.





En cuanto a aspectos más técnicos, está claro que Cronenberg consigue una estupenda conjunción entre lo visual y sonoro (con lo musical, especialmente). Tanto el vestuario como la dirección artística son más que convincentes y efectivos, aunque nada especialmente novedoso para lo que ya se ha visto en anteriores producciones de este tipo. Pero sobretodo el manejo de la luz natural y algunos encuadres bastante extraños pero puntuales (como que sólo un trozo de la imagen esté desenfocada), le dan un toque especial a las escenas y aportan un toque menos corriente. Howard Shore realiza un trabajo excelente con la banda sonora, ya que suena con fuerza ya desde el inicio y aporta grandilocuencia y dramatismo constante.

Siendo breves, puede que no sea tan potente como Una historia de violencia (por citar una de las recientes y más distanciadas a su estilo visceral), pero lo cierto es que resulta interesante y demuestra una gran habilidad de estilo con el manejo de los actores y lo visual. Técnicamente por encima de la media. Además de que me despierta una sensación similar a lo que ya fue La red social, en su segundo visionado, cuando ya sabes lo que te espera, se torna mucho más disfrutable.


Nota: 7'5

1/12/11

Brevedades - Ridley Scott, John Carter y posters

Pues sí chicos, recientemente han salido a la luz un puñado de fotografías oficiales de la nueva película de Ridley Scott, Prometheus. Un film que no parte ni como secuela ni precuela de Alien, pero sí que se podría considerar una especie de spin-off (al menos por lo que he entendido, porque estoy hecho un lío). Como podéis ver, el reparto lo completan Charlize Theron, Noomi Rapace y Michael Fassbender entre otros. Pronto el trailer.



Segundo trailer oficial de John Carter, esta vez aprovechando al 100% la peculiar versión de Marte que se narra en esta adaptación homónima. Entretenimiento asegurado, pero esperemos que vaya un poco más allá.


Remato la faena con un puñado de posters. El primero de ellos es Promoción Fantasma, la nueva película del director de Spanish Movie, donde un profesor de instituto debe ayudar a un grupo de fantasmas, antiguos alumnos del centro, a aprobar las asignaturas que les quedaron pendientes. Pinta curiosa, y por el trailer que tenemos aquí puede ser bastante divertida.



Poster definitivo de Sherlock Holmes: A game of shadows, sencillo y efectivo.


Acabo con una foto filtrada de Daniel Day-Lewis caracterizado (a medias) como Abraham Lincoln, para el próximo film de Steven Spielberg, después de estar varios años estancado el proyecto, cuando el que iba a interpretar a Lincoln iba a ser Liam Neeson. Curioso más que nada, esa barba resulta hipnótica.